Veinte años -de Madrid Fusión- no son nada cantaba Gardel en uno de sus tangos más famosos. O lo son todo.
Veinte años cumplió Madrid Fusión y lo celebró como se merece. Porque desde su escenario principal han pasado los mejores y han contado novedades, los proyectos, exclusivas propuestas y avances de sus temporadas.
Porque las tablas de auditorio han -y hemos- visto cómo han evolucionado año tras año con una oferta cada vez más audaz (algunos como Ángel León tenían el lleno asegurado) y con resultados que parecían sacados de un laboratorio del CSI. Innovación, investigación, técnica y desarrollo. Mucha innovación, tanta que muchos se perdían.
Resulta que este año el lema era “Más allá del producto” con la consigna de “poner en valor los aspectos más relevantes de la mejor cocina, tradicional y contemporánea”. Y se añade: “revisionará las técnicas de cocina ancestrales, tradicionales y futuras, desde los asados al fuego a la cocina con microondas o con el empleo de ultrasonidos, base de grandes platos del futuro.”
Por cierto, la ponencia de Eduard y Oriol (Disfrutar, Barcelona) fue una de las que hay que entrar. Sí, innovadora, pero con los pies en la tierra dando un masterclass con su cocina en microondas. Partiendo del bizcocho de sifón que ya elaboraron en el Bulli hace 16 años, presentaron los crujientes de diferentes quesos realizados en el microondas sólo dentro de un molde de silicona. “Quedan como unas galletas solo que de queso”. Venga, ahora todo el mundo a practicar.
Tengo que señalar un año más, la diferencia entre el Congreso en sí, y lo que hay alrededor. Porque la exposición que acompaña y la que muchos ni siquiera pueden ver (hay compañeros que no se levantan de la silla haciendo sus crónicas) este año me ha parecido más amplia. Mucho espacio entre ellos y con un setenta por ciento aproximadamente de expositores institucionales.
Todos ellos dando a conocer su oferta gastronómica que la mayoría de las veces, por no decir siempre, poco tiene que ver con lo que pasa en el congreso.
Menos empresa privada, aunque me comentan que tener la semana siguiente a Alimentaria en Barcelona y al final de mes Salón Gourmets es inviable para muchas de ellas. A excepción de las grandes claro. Porque la inversión económica de estos espacios, a los que hay que sumarle desplazamiento, personal y producto, es bastante alta.
“Sin Madrid Fusión no podríamos haber contado todo lo que hemos contado, y no seríamos lo que somos. Nos ha permitido generar comunidad, compartir y demostrar que la gastronomía es una herramienta de transformación poderosa, hoy más necesario que nunca para generar paz”.
Así abría su ponencia Joan Roca.
Es innegable que este congreso ha abierto las puertas para muchos cocineros (muchos lo confesaban en el pequeño homenaje que se hizo) y también les ha dado voz.
“Para Perú, Madrid Fusión fue una vitrina determinante. A partir de aquí, muchas personas conocieron los productos y la gastronomía del país. Nos abrió las puertas y nos hizo compartir”. Gastón Acurio.
Dejemos entonces que Madrid Fusión vuelva a hacer su magia y nos desvele aquellos cociner@s que nos sorprenderán en un futuro que ya está aquí.
¡Bienvenido MF2023!